Como Cuidar una SerpienteLa gran variedad de mascotas comunes también incluye ciertos reptiles como las serpientes. Son mascotas fascinantes, pero obviamente no son adecuadas para todos. Cualquiera que elija uno de estos reptiles debe estar familiarizado con su cuidado, alimentación y características de comportamiento, ya que su cuidado es diferente a los de los perros, gatos, aves y peces.

¿Cómo Elegir una Serpiente como Mascota?

Una serpiente como mascota es un compromiso a largo plazo, ya que muchos pueden llegar a vivir más de 20 años.

Debes estar dispuesto a alimentar tu serpiente con animales vivos o recién muertos.

Las serpientes son persistentes artistas del escape, ya que son capaces de pasar por pequeñas aberturas. Debes asegurarte de que tu tanque sea a prueba de fugas.

No se recomienda como mascotas a las serpientes que son potencialmente peligrosas como las grandes serpientes constrictoras o serpientes venenosas. Además, debes evitar serpientes que son difíciles de cuidar, tales como las boas constictoras, pitones de Birmania, serpientes de agua y serpientes verdes.

Debes obtener una serpiente criada en cautividad de un criador responsable. Las serpientes salvajes tienden a ser más estresadas y propensas a los parásitos y las enfermedades. Además, son más difíciles de domar.

Es recomendable piderle que te hagan una demostración de alimentación para asegurar que tu serpiente no presente problemas de alimentación.

Las Mejores Serpientes como Mascotas

Serpientes de maíz, serpientes reales y pitones reales son más recomendados para principiantes, ya que son de un tamaño razonable, más fáciles de cuidar y bastante dóciles.

La Pitón Real. Es sin duda la serpiente más popular de tener como mascota. Pueden llegar a medir entre tres y cinco pies de longitud, y pueden vivir más de 40 años en cautiverio. Son buenas serpientes para principiantes, ya que son bastante dóciles, fáciles de manejar y no requieren mucha calefacción o iluminación. Sin embargo, esta especie es conocida por negarse a comer.

La Serpiente Real. Estas serpientes son bastante dóciles y hermosas. Presentan colores y patrones llamativos que varían entre subespecies. Pueden llegar a vivir hasta los 20 años de edad y algunas especies adultas pueden superar los seis pies de longitud. Se reproducen con cierta facilidad en cautiverio, pero es esencial duplicar las condiciones típicas de su hábitat natural.

La Serpiente de Maiz. Es otra especie ideal para principiantes, y son muy populares debido a su pequeño tamaño (tres a cinco pies de longitud) y patrones de color diferentes. Son serpientes muy dóciles y fáciles de cuidar. Pueden llegar a vivir entre los 15 a 20 años de edad. Son excelentes artistas del escape, y debes asegurar que el recinto sea a prueba de fugas.

Consejos Basicos para el Cuidado de una Serpiente en el Hogar

1. Las serpientes son carnívoras, y deben ser alimentadas una o dos veces a la semana. Pequeños roedores como ratones son ideales. Asegúrate que estén recién muertos, ya que vivos pueden hacerle daño a tu mascota en defensa propia. Hasta un pequeño ratón puede causar lesiones a una serpiente.

Es más conveniente mantener un suministro de presas congeladas que criar o comprar presas vivas para la alimentación.

Presas congeladas deben ser completamente descongeladas y calentadas ligeramente antes de darselo a la serpiente. Cuelga la presa muerta con pinzas, moviendola un poco para atraer la atención de la serpiente. Nunca debes hacer esto con los dedos.

2. Las serpientes necesitan ser capaces de regular su temperatura corporal moviendose entre las zonas frías y calientes dentro su tanque o acuario. Esto es esencial para la salud de la serpiente, en particular su capacidad para digerir su comida.

Proporcionale una fuente de calor en un lado del tanque; permitirá a la serpiente moverse a una temperatura mayor o menor para adaptarse a sus necesidades.

3. Las serpientes cambian de piel periódicamente. Durante este tiempo, requerirán más agua, y asegurate de colocar un plato poco profundo de agua en la que pueda absorber. Deberás cambiársela a menudo.

Los signos más comunes de una serpiente que está a punto de cambiar su piel son:

Sus ojos se vuelven un color claro o azulado.

La piel se vuelve opaca en apariencia.

La serpiente pasa más tiempo ocultándose y deja de comer. Debes evitar interactuar con la serpiente tanto como sea posible, ya que el proceso es estresante y su piel nueva es delicada. Si debes alimentar a tu serpiente, proporcionale un alimento más pequeño de lo habitual para minimizar el esfuerzo para digerir la comida.

Cuando la serpiente está lista para cambiar su piel, buscará superficies rugosas como trozos de madera y piedras limpias no asperas dentro del tanque o acuario para ayudarle a retirar la piel vieja.

4. Las serpientes son artistas del escape, ya que pueden caber a través de espacios sorprendentemente pequeños.

5. Las grandes serpientes constrictoras como las boas y pitones requieren mayores precauciones en su cuidado. Han habido casos de grandes pitones que han causado lesiones graves e incluso la muerte a algunos niños y adultos. Hay medidas que se pueden implementar para evitar incidentes trágicos.

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