Aplicar Rubor

Aquí te ofrecemos algunas ideas de cómo ponerte el rubor según tu tipo de rostro. Lucir mejillas sonrosadas es un símbolo de delicadeza que nos hace lucir lindas y femeninas. Esta es precisamente la función del rubor en el maquillaje: dar un toque de color a tu rostro. De ahí la importancia de aplicarlo correctamente y según la forma de tu rostro. Sigue estas sugerencias y descubre cómo usarlo.

Trucos al Aplicarlo

– La piel debe estar totalmente limpia y, al igual que las brochas o esponjas que uses para aplicarlo.

– No sobrecargues la brocha. Para eliminar el excedente de polvo, sopla ligeramente el aplicador.

– Evita que se marque demasiado en algunas zonas de tu rostro. Para esto es necesario difuminar, mediante movimientos circulares de las mejillas hacia arriba.

– Prefiere tonos claros que aportan brillo a tu rostro. Los colores oscuros, por el contrario, hacen que algunas zonas parezcan hundidas.

¿Cómo Colocar el Rubor Según el Tipo de Rostro?

• Rostro ovalado. En este caso, la mejor manera de aplicar el rubor es empezando por lo alto del pómulo y descendiendo hasta un poco más arriba de donde se hunde la mejilla. Evite pasar el rubor muy cerca de los ojos o de la nariz. Puede utilizar un tono más brillante sobre el hueso del pómulo y también en la frente, la nariz y la barbilla.

• Rostro redondo.
La prioridad es lograr que el rostro se vea más alargado. Para ello, se debe dar contorno y afinar la cara, mediante la aplicación de rubor en polvo de un tono más oscuro en líneas diagonales bajo el pómulo y prolongarlo hacia la mandíbula.

• Rostro cuadrado.
Sonríe frente al espejo y aplica un color de rubor más brillante en las partes que sobresalgan del rostro. Luego, usando una brocha de cerdas gruesas, aplica el rubor bajo el hueso del pómulo en una media luna hasta el extremo superior de la mejilla. Si la frente es ancha, se debe aplicar sombra oscura a los lados y llevarla hasta el extremo de las cejas.

• Rostro triangular.
Se debe usar rubor de color vivo en la barbilla y en el área más sobresaliente sobre las mejillas. En la frente, se puede usar un tono más oscuro que a los lados.

• Rostro alargado.
Para que el rostro se vea más corto, el maquillaje debe realizarse en sentido horizontal. Por ello, se debe aplicar el rubor directamente en el hueso de las mejillas y difuminarlo horizontalmente hacia la línea del cabello. Se debe usar un poco del mismo rubor en la barbilla y la frente para reducir el largo del rostro.

• Rostro rectangular.
Es necesario redondear el rostro. Aplica el rubor casi en forma horizontal sobre el hueso de la mejilla y también en la barbilla para suavizarla un poco.

• Rostro corto.
Se debe aplicar el rubor en forma de ala, comenzando en el centro de la mejilla y difuminando hasta las sienes. Evita el brillo o tonos muy pálidos porque dan la impresión de «borrar» la parte inferior de la cara. Escoge colores más vivos para alargar el rostro.

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